Las situaciones que han afectado a algunos jugadores de los Zorritos son de miedo. ¿Estarán embrujados?
En 2017 los Zorritos iniciaron su participación en la liga con un equipo muy diverso, con mezcla de jóvenes y veteranos. Dos jóvenes se destacaron rápidamente: Deshaun Watson y Christian McCaffrey. Ambos entraron a la cancha rápidamente, pero Watson no pudo terminar la temporada por una lesión en su sexto partido.
Los Zorritos terminaron penúltimo lugar de la tabla, lo que les permitió elegir en segunda posición del draft de novatos de 2018.
En ese año todos los reflectores estaban sobre el corredor Saquon Barkley, por lo que los Zorritos tendrían que buscar el siguiente talento de la lista para mejorar a su equipo. Con la segunda selección global se llevaron al corredor Derrius Guice que venía de una temporada exitosa en Penn State. Guice jugó únicamente 5 partidos en la toda su carrera pues se rompió los ligamentos dos años seguidos y para el inicio de la tercera campaña fue arrestado con cargos de abuso sexual.
Ese mismo, pero en la segunda ronda los Zorritos se llevaron a Ken Dixon, un talentoso corredor que había pasado su primer año lesionado en los Ravens. Lamentablemente para el inicio de la temporada Dixon se volvió a lesionar y fue colocado en la reserva de lesionados, y aunque logró regresar, ya nunca pudo retomar su carrera.
A pesar de la mala suerte, la temporada 2018 no terminó mal para los Zorritos, y estaban seguros de que se había enderezado el rumbo del equipo.
El equipo parecía salir fortalecido del draft de 2019, con jugadores como Deebo Samuel y Dwayne Haskins pero otra vez la mala suerte apreció. Haskins nunca pudo alcanzar el rendimiento que tuvo en el colegial hasta que fue cortado por Washington. Lamentablemente, en 2021 Haskins falleció en circunstancias extrañas.
Con la última selección de ese draft, los Zorritos se llevaron a Rodney Anderson, un corredor con una gran carrera en el colegial, pero en el último partido de la pretemporada se rompió los ligamentos con lo que se perdería toda la temporada. En 2020 fue puesto en la lista de lesionados nuevamente hasta que fue cortado por el equipo.
En 2020, el equipo adquirió una selección de primera ronda para llevarse al velocista Henry Ruggs, quién en su primera temporada dio flashazos de calidad. Para la segunda temporada, Ruggs se estaba consolidando como un referente de la ofensiva hasta que una fatídica noche Ruggs provocó un accidente de tránsito donde resultó una persona muerta y tuvo que enfrentar cargos de homicidio. Los Raiders lo cortaron inmediatamente y su carrera tuvo un abrupto desenlace.
Para colmo, en la transacción para adquirir ese pick, a los Zorros llegó Kerryon Johnson. Kerryon venía de una buena temporada pero las rodillas le empezaron a fallar y su rendimiento se fue a pique al grado que en 2021 ya estaba fuera de la liga.
En 2021, Christian McCaffrey que era la gran estrella del equipo, se volvió a lesionar por segundo año consecutivo, dando la puntilla a la temporada del equipo. Los Zorritos tuvieron un arranque de locura y vendieron todo para iniciar de nuevo.
Con un montón de selecciones de draft se llevaron a buenos prospectos pero la maldición volvió a aparecer.
El primer golpe llegó rápido, pues poco tiempo después del draft, al receptor John Metchie, seleccionado en segunda ronda, le diagnosticaron una forma de leucemia, lo que lo alejó de las canchas, al menos por su primera temporada.
Con la primera selección, los Zorritos se llevaron a Breece Hall, el mejor prospecto del draft, y en su debut demostró que era todo lo que decían que era. Sin embargo, el sueño duró muy poco pues en la semana 7 se rompió los ligamentos y terminó su temporada.
En cinco años, los Zorritos se han enfrentado a muchas dificultades, cárcel, lesiones y hasta cáncer, pero hoy la renovación del equipo va en camino, y a pesar de haber tocado fondo en la temporada 2022, hay esperanza de un futuro brillante.
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